Tus únicas guías son los santuarios misteriosos. Tu único aliado es un robot amigable: la unidad de apoyo del traje. Te despiertas como un enano, encadenado en un exotraje sin memoria del pasado. Lo que te rodea son las paredes de un antiguo templo. Insectos peligrosos acechan en las sombras. Monstruos feroces deambulan por la tierra. Los humanos se han asentado sobre las ruinas del antiguo imperio. Sales del templo y descubres que sus constructores han sido olvidados hace mucho tiempo. Antig.
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